top of page
  • Foto del escritorConstructora Ormiga

Vivir a las afueras de la ciudad, una decisión para lidiar mejor la cuarentena


El periodo de cuarentena generado por el Covid-19 ha hecho tomar conciencia a muchas personas sobre el valor que tienen los espacios amplios, la ventilación natural, la luz y las prácticas sostenibles. Este tipo de características se encuentran generalmente en viviendas de grandes espacios, ubicadas a las afueras de las principales ciudades.


Ante la emergencia sanitaria mundial causada por el Coronavirus que nos ha obligado a pasar los días aislados, vivir hacia las periferias es una tendencia que está en crecimiento: en estas áreas los inmuebles son más amplios, hay menos gente, el contacto con la naturaleza es constante y el tiempo de confinamiento puede ser más llevadero.


De acuerdo con información de periódicos internacionales, muchas personas han manifestado interés en pasar la cuarentena en viviendas más amplias, lejanas del ruido y los tumultos. Según datos del diario norteamericano The New York Times, durante mayo de este año una gran parte de los habitantes de Manhattan se mudaron a viviendas rurales.


Por ejemplo, en Bogotá, “es probable que las personas que tengan una segunda vivienda en las afueras estén residiendo allí, incluso, muchos se han mudado temporalmente con familiares que viven más alejados de la ciudad. Este fenómeno también se está presentando en otras ciudades del mundo como San Francisco y Madrid”[1].


Ante la actual circunstancia en la que gran parte de los miembros del hogar están desempeñando sus actividades en casa, la versatilidad se hace necesaria, pues los espacios se están adaptando para actividades que van desde el teletrabajo hasta los deportes. Esto explica el auge de la demanda de casas modulares, espaciosas y cercanas a la naturaleza.


Si bien la mudanza a las afueras de las ciudades ha estado en aumento desde hace un tiempo, el pronóstico es que debido a la pandemia, esta tendencia aumentará. “Según el Departamento Nacional de Estadística (DANE), mientras Bogotá tuvo un crecimiento poblacional de aproximadamente el 10 %, los municipios de la Sábana crecieron tres y hasta cuatro veces esa cifra. Por ejemplo: la conurbación Funza-Mosquera-Madrid creció un 43 %, la conurbación Cota-Chía-Cajicá creció 31 % y Soacha tiene 37 % más habitantes que en el 2005”[2].


Los beneficios principales que argumentan las personas que desean vivir fuera de las grandes ciudades, son:

  • Ambientes más tranquilos

  • Inmuebles con mayor espacio

  • Zonas más propicias para hacer deporte

  • Lugares más adecuados para vivir con las mascotas

  • Contacto directo con la naturaleza

  • Menor densidad de población, factor que disminuye el riesgo de obtener un contagio por Coronavirus

Para el arquitecto Eran Chen, en estos tiempos de aislamiento y permanencia en casa, los espacios verdes y la cercanía con la naturaleza de algunas viviendas es la única conexión sana entre el interior y el exterior, además de ser una herramienta que ayuda a reducir la soledad y la depresión.


Vivir lejos del tráfico pesado, la contaminación, el ruido, la gran densidad de población y el estrés, es una tendencia que va en aumento, sobretodo en época de pandemia, como una medida para prevenir y evitar el contagio por el Covid-19. Cualquiera que sea la razón, si estás pensando en hacer un cambio en tu vida y mudarte a zonas alejadas de los grandes centros urbanos, no olvides que en Constructora Ormiga contamos con alternativas de vivienda que te permiten hacer realidad ese anhelo en nuestros proyectos en Acacías. Contáctanos para más información al (317) 437-2219.

 

[2] Ibid

1178 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page